China es uno de los países que encabeza una de las batallas más grandes en el planeta Tierra. No se trata de una guerra tradicional con armas de fuego y grandes formaciones militares, sino una guerra a escala microscópica contra un enemigo de toda la humanidad: los virus. Desde que hay vida en la Tierra, los seres vivos nos hemos enfrascado en una terrible carrera armamentística contra los virus (entidades no vivas). Con el avance de la ciencia, los seres humanos contamos cada vez con más herramientas para enfrentar a los virus, aunque se trata de una carrera de fondo en la que hoy en día no todas las infecciones víricas son curables, pero cada vez son menos los virus que pueden acabar con las vidas humanas.
Un pionero de la lucha moderna contra los virus es 侯云德 Hóu Yúndé (1929-), un científico chino que se ha enfrentado contra numerosas enfermedades víricas, consiguiendo grandes victorias e instaurando nuevos campos de investigación. Gracias a los estudios de 侯云德 Hóu Yúndé, virus que en el pasado eran mortales, hoy en día son tratables, y los infectados pueden retomar su vida normal. Desde muy temprana edad, la vida de 侯云德 Hóu Yúndé estuvo marcada por la guerra contra los virus, transformándose en uno de los mayores especialistas del siglo XX y principios del siglo XXI.
El amor por un hermano
En julio de 1929, nació 侯云德 Hóu Yúndé en la provincia de 江苏 Jiāngsū. Su familia administraba un pequeño banco y tenían una vida relativamente próspera y acomodada. No obstante, en 1937, tras el 七七事变 Qī qī shì biàn, Incidente del 7 de julio (también conocido como Incidente del puente Marco Polo), en el que las tropas de invasión japonesas sobre China atacaron las inmediaciones de la ciudad de 北京 Běijīng, la familia huyó. Tras abandonar el banco y la casa familiar, todas las propiedades fueron saqueadas aprovechando el descontrol causado por la invasión japonesa y la familia se hundió en la más absoluta pobreza.
Debido a la desesperada situación de la familia, con tan solo 10 años, 侯云德 Hóu Yúndé comenzó a trabajar, intentando aportar su pequeño granito de arena a la compleja economía familiar. Cuando no asistía a la escuela, 侯云德 Hóu Yúndé iba a pescar y criaba gallinas que luego vendía en un puesto callejero. A pesar de la dura vida que le tocó vivir, 侯云德 Hóu Yúndé destacó por sobre otros niños por su gran amor al estudio e incluso consiguió saltarse grados debido a su buen rendimiento académico. Por aquellos años 侯云德 Hóu Yúndé no sabía a qué quería dedicar su vida ya que, al igual que muchos jóvenes, en plena Guerra de resistencia contra la agresión japonesa (1931-1945) el futuro era realmente negro e incierto. No obstante, luego de que su hermano mayor contrajera una enfermedad vírica y falleciera sin que los médicos pudieran hacer nada por salvarlo, 侯云德 Hóu Yúndé decidió que dedicaría su vida a combatir a los responsables del fallecimiento de su hermano: los virus.
Concentrado en la guerra
Mientras en China se producía la épica resistencia contra la invasión japonesa y luego ocurría una guerra civil, 侯云德 Hóu Yúndé se mantenía centrado en el verdadero enemigo, que no eran ni los soldados invasores, ni los soldados de uno u otro bando político, sino los temibles virus, que seguían cobrándose la vida de millones a lo largo y ancho del país. En 1948, por sus altas calificaciones, 侯云德 Hóu Yúndé fue admitido en la 上海同济大学医学院 Shànghǎi Tóng jì dà xué yī xué yuàn, Escuela de Medicina de la Universidad Tóngjì de Shànghǎi. Tras graduarse, comenzó a trabajar en el Departamento de Microbiología del Instituto Central de Salud en Běijīng.
El viaje del héroe
En 1956, 侯云德 Hóu Yúndé aprobó un complejo examen nacional para recibir una beca de estudio en la Unión Soviética. Tras obtener una de las notas más altas, fue destinado al Instituto Ivanovsky de Virología de la antigua Academia Soviética de Ciencias Médicas, donde se especializó en la parainfluenza bajo la tutela del profesor Gorbunova. Durante los años 1958 y 1962, estudió en la Unión Soviética donde obtuvo una gran fama por su obstinación en el trabajo y siempre era el último en irse del laboratorio cada día. El personal de seguridad de los laboratorios, conmovidos por el duro trabajo de 侯云德 Hóu Yúndé, le entregaron las llaves del instituto, de forma completamente irregular, para que pudiera entrar y salir fuera de las horas de trabajo y así continuar con sus investigaciones.Un día, el instituto de investigación soviético entró en crisis: al volver a los laboratorios, todos los ratones habían fallecido. Los síntomas que habían experimentado los ratones eran muy extraños y no sabían qué era lo que los había enfermado. Ningún investigador soviético tenía muy claro por dónde comenzar a investigar para descubrir el problema. 侯云德 Hóu Yúndé descubrió que los síntomas que habían experimentado los ratones antes de la muerte súbita eran coincidentes con los de la infección por virus Sendai, un patógeno muy poco habitual. A partir de esta hipótesis comenzó a recolectar muestras e intentar aislar al supuesto virus. Tras repetidos intentos, consiguió aislar al patógeno, que efectivamente era el virus Sendai. Con este descubrimiento consiguió asombrar incluso a los mayores investigadores del instituto, que reconocieron a 侯云德 Hóu Yúndé como una gran promesa de la investigación médica.
En esta investigación, 侯云德 Hóu Yúndé descubrió por primera vez que el virus podía obligar a las células a fusionarse, transformándolo así en un virus mucho más mortal. A partir de estos descubrimientos, y porque el virus Sendai era también mortal en humanos, 侯云德 Hóu Yúndé trabajó en desarrollar un tratamiento. Así promovió el nacimiento de toda una rama médica: la tecnología de anticuerpos monoclonales. Alrededor de estos hallazgos sobre el extraño comportamiento del virus publicó 17 trabajos en la Unión Soviética.
Tras la publicación de estos trabajos, el Ministerio de Educación de la Unión Soviética acordó concederle directamente el doctorado en Ciencias Médicas por su trabajo sobresaliente. Esta forma de obtener un doctorado fue algo sin precedentes en la historia del instituto. Durante la fiesta del doctorado, el director del instituto le ofreció a 侯云德 Hóu Yúndé una muy buena plaza como investigador permanente, pero el virólogo chino la rechazó para volver a su país donde continuar sus investigaciones.
Transformar al Mundo
Tras volver a China en 1962, 侯云德 Hóu Yúndé comenzó a estudiar virus que producían infecciones respiratorias, un gran problema en la época. A pesar de que logró grandes resultados en este campo, no estaba conforme con los avances, consiguiendo aislar los virus de la parainfluenza tipo I, II y IV. Entre los años 1962 y 1964, epidemias respiratorias ocurrieron en 北京 Běijīng, lo que llevó a 侯云德 Hóu Yúndé a replantearse su trabajo. En sus palabras:
认识世界的目的应当是要改造世界
Rèn shí shì jiè de mù dì yīng dāng shì yào gǎi zào shì jiè
El objetivo de conocer el mundo debe ser cambiar el mundo.
Aunque a 侯云德 Hóu Yúndé le gustaba la investigación de laboratorio sobre los virus, tenía en mente que el objetivo de sus estudios no era solo satisfacer la curiosidad, sino conseguir grandes cambios, como por ejemplo acabar con el sufrimiento de millones de infectados por los virus que estudiaba. Por esta razón, pasó de la investigación básica al desarrollo de medicamentos antivíricos y comenzó a investigar a los interferones, sustancias naturales del sistema inmune que combaten a los virus.
El precio de la vida humana
A partir de interferones humanos se pueden fabricar algunos medicamentos antivíricos. A principios de la década de 1970, todos los medicamentos de interferones utilizados en China eran importados. El costo por cada dosis superaba los 300 yuanes, y un tratamiento podía alcanzar los 30.000 yuanes, un precio completamente prohibitivo para cualquier paciente, e incluso para el propio Estado chino, que contaba con limitados recursos. Por esta razón 侯云德 Hóu Yúndé comenzó a trabajar en desarrollar medicamentos de interferones nacionales. A partir de 8.000 ml de sangre humana, el equipo de 侯云德 Hóu Yúndé conseguía preparar 1 mg de medicamento de interferón. Esto reducía los costes de las dosis a 100 yuanes, aunque seguía siendo un precio excesivo. Por lo tanto, aunque habían conseguido desarrollar la tecnología, seguía siendo extremadamente cara. 侯云德 Hóu Yúndé era consciente de los problemas con los precios y se puso manos a la obra para reducir los costes y aumentar la producción.Tras numerosos intentos fallidos, en 1982, el equipo de investigación de 侯云德 Hóu Yúndé consiguió desarrollar un medicamento de interferón nacional utilizando ingeniería genética. Esto abrió el campo de la producción de medicamentos a bajos costes utilizando ingeniería genética en China. Mejorando las técnicas, 侯云德 Hóu Yúndé consiguió reducir el precio de las dosis primero a 30 yuanes y luego a 10, lo que complementado con el rápido desarrollo económico chino, transformó a las dosis en algo que cualquier paciente puede permitirse. En la actualidad, más del 90% de los medicamentos antivíricos utilizados en China se producen a nivel nacional utilizando técnicas de ingeniería sobre interferones. Con los desarrollos de 侯云德 Hóu Yúndé comenzó a fabricarse un medicamento contra la Hepatitis B crónica que ha sido muy útil para tratar niños pequeños y que ha comenzado a ser exportada a todo el globo. 侯云德 Hóu Yúndé y su equipo desarrollaron 8 grandes medicamentos antivíricos utilizados en todo el país.
El milagro económico chino
Uno de los problemas que se encontraba 侯云德 Hóu Yúndé para la investigación y la posterior producción de los medicamentos era el financiamiento. Aunque trabajó en importantes institutos de investigación estatal, a la hora de producir los medicamentos el Estado chino no contaba con la inversión necesaria para montar grandes fábricas productoras. Aprovechando las reformas económicas introducidas por el presidente 邓小平 Dèng Xiǎopíng, el ingeniero especialista en medicina 程永庆 Chéng Yǒngqìng le propuso a 侯云德 Hóu Yúndé que una empresa privada patrocinara el desarrollo a gran escala de sus medicamentos con el objetivo de ganar dinero con la posterior venta. Aunque al principio 侯云德 Hóu Yúndé temía que la propuesta fuera lucrar con la enfermedad de los pacientes, pronto comprendió que la inversión privada era el camino no solo para conseguir desarrollar los medicamentos a gran escala, sino también para continuar reduciendo los costos.
Atraídos por las promesas de las ganancias en las ventas de medicamentos, muchos inversores apostaron por el proyecto y de esta forma 侯云德 Hóu Yúndé consiguió el dinero necesario para comenzar a producir los medicamentos. Como el objetivo final de los empresarios es conseguir el medicamento más competitivo, ofreciendo un bajo coste que consiga que todos lo adquieran, los procesos de producción se mejoraron para reducir los costes. De esta forma 侯云德 Hóu Yúndé y sus colegas consiguieron dos grandes objetivos: en primer lugar, ofrecer medicamentos baratos y accesibles de producción nacional a sus pacientes con infecciones víricas y por otro lado enriquecer a los inversores chinos y hacer que se interesen más por la inversión en ciencias médicas.
Preparados para el siguiente enfrentamiento
En el año 2007, 侯云德 Hóu Yúndé fue designado al frente del Centro de Prevención y tratamiento de las principales enfermedades infecciosas, para combatir a enfermedades tales como el SIDA o la hepatitis viral. Habían pasado ya 5 años de la crisis del SARS, en la que grandes médicos chinos y colegas suyos como 钟南山 Zhōng Nánshān, 陈薇 Chén Wēi y 张伯礼 Zhāng Bólǐ habían conformado una importante línea de defensa, para 侯云德 Hóu Yúndé el país no había estado preparado y su trabajo debía ser equipar al personal médico para la siguiente gran batalla contra los virus. En sus palabras:
非典来得太突然,我们没有准备,病毒研究不充分,防控体系太薄弱了。
Fēi diǎn lái dé tài tú rán, wǒ men méi yǒu zhǔn bèi, bìng dú yán jiū bù chōng fèn, fáng kòng tǐ xì tài bó ruò le.
El SARS vino de pronto, nosotros no estábamos preparados: la investigación del virus era insuficiente y el sistema de prevención y control era muy débil.
传染病在历史上是可以让一个国家灭亡的,老的病毒控制了,还会不断出现新的,传染病防控绝对不能轻视!
Chuán rǎn bìng zài lì shǐ shàng shì kě yǐ ràng yīgè guó jiā miè wáng de, lǎo de bìng dú kòng zhì le, hái huì bù duàn chū xiàn xīn de, chuán rǎn bìng fáng kòng jué duì bù néng qīng shì!
Las enfermedades infecciosas históricas pueden destruir a un país. Una vez que los viejos virus estén bajo control, seguirán apareciendo nuevos. ¡No hay que subestimar el control y la prevención de las enfermedades infecciosas!
En 2009 llegó la prueba de fuego para 侯云德 Hóu Yúndé cuando la influenza A (H1N1) se transformó en una pandemia. Con gran determinación no solo dirigió a equipos de expertos, sino que también se encargó de la coordinación entre diferentes departamentos para asegurar una colaboración fluida y una respuesta rápida. 72 horas después de obtener las primeras muestras, el equipo de 侯云德 Hóu Yúndé consiguió aislar las variedades de influenza A que estaban en el país. A partir de esto, en tan solo 87 días los equipos médicos consiguieron desarrollar una vacuna contra el H1N1, convirtiendo así a China en el primer país del mundo en contar con una vacuna, muchos meses antes que otros países.
El terror de los virus
En cada nueva epidemia, como las de 2013 de H7N9 y H5N1 de la influenza aviar, el equipo de 侯云德 Hóu Yúndé continuó acotando los tiempos de respuesta cada vez más. Por estos logros en la rápida respuesta a las pandemias víricas y por su gran trayectoria, en 2017 fue galardonado con el 国家最高科学技术奖 Guó jiā zuì gāo kē xué jì shù jiǎng, Máximo Premio Nacional de Ciencia y Tecnología, la máxima condecoración científica del país. Con más de 500 artículos científicos y 8 libros, 侯云德 Hóu Yúndé se ha transformado en el verdadero terror de los virus, logrando importantes victorias en una batalla de millones de años.
El presidente 习近平 Xí Jìnpíng haciendo entrega del premio a 侯云德 Hóu Yúndé. |
El mayor logro de 侯云德 Hóu Yúndé es, sin duda, haber formado a cientos de profesionales y haber alcanzado a millones de pacientes con sus medicamentos. La guerra contra los virus nunca concluirá, pero gracias a científicos como 侯云德 Hóu Yúndé, la humanidad estará al pie del cañón enfrentando a estos patógenos.
南
Descargar PDF (próximamente)