Imaginar la situación de los campesinos chinos en la actualidad es una tarea compleja. En el imaginario popular han quedado las épicas imágenes de los campesinos chinos trabajando la tierra con sus manos de forma colectiva tras la fundación de la República Popular China. No obstante, muchos años han pasado desde entonces y aquellas imágenes contrastan con el gran desarrollo que muestran ciudades futuristas y tecnológicas como 深圳 Shēnzhèn. ¿Habrá llegado el desarrollo tecnológico al campo? ¿Siguen viviendo los campesinos chinos en la más absoluta pobreza? ¿Intentan los hijos de los campesinos huir a las grandes ciudades?
En pocos años el campo chino ha cambiado, se ha reinventado, ha prosperado y se ha transformado en otro gran ejemplo de desarrollo tecnológico y científico. Grandes máquinas trabajan la tierra y la producción, y por consecuencia los ingresos de los campesinos han aumentado. Empero, hay lugares donde todavía el desarrollo parece no haber permitido una mejora de las condiciones de vida. Es en estos lugares, donde campesinos y científicos han trabajado arduamente en la última década, para desarrollar una agricultura sostenible que mejore las condiciones de vida de los lugareños y permita incluso reforestar zonas de antiguos bosques tomadas para los cultivos. A estos lugares viajó el equipo de la CGTN en Español, para conocer las historias de los campesinos que con su inventiva, dedicación y trabajo, asistidos por equipos científicos, consiguieron erradicar la pobreza a la vez que crear una agricultura más amigable con el medio ambiente. La serie documental Recorriendo el campo chino (2022) reúne estas historias de éxito y esconde grandes enseñanzas y consejos para quienes buscan ideas alternativas para el desarrollo de zonas rurales.
Convivencia armoniosa
En el primer capítulo de esta serie se desarrolla una temática muy compleja pero sumamente interesante: el desarrollo de un área rural pobre mediante cultivos orgánicos de gran valor en el mercado. En el pequeño condado de 石台 Shítái, en la provincia de 安徽 Ānhuī, los campesinos eran históricamente pobres y sus cultivos de arroz eran poco eficientes, lo que daba lugar a bajos rendimientos y por ende pocos ingresos.
En el año 2002, un grupo de agrónomos viajó a la región para analizar el suelo y así saber qué cultivos serían eficientes y reportarían los anhelados ingresos para los locales. El suelo resultó ser rico en selenio, algo muy extraño en el suelo chino. De esta forma surgió la idea de desarrollar cultivos ricos en selenio, que pudieran venderse por su valor nutricional agregado. Esto cambió por completo la mentalidad de los campesinos, que pasaron de mirar los rendimientos, a la calidad del producto final. En 2012, el distrito se transformó en el principal productor de arroz rico en selenio del país.
Para disminuir el uso de productos químicos, abaratando así el coste de inversión que debía realizar cada campesino así también como incrementando el valor del producto final por tratarse de un alimento orgánico, se combinó el cultivo con la crianza de patos en el mismo campo. No es necesario aplicar herbicidas para eliminar las malas hierbas porque los patos son los encargados de comérselas. Por si fuera poco, los mismos patos consumen los insectos perjudiciales para los cultivos de arroz.
La fama de los productos orgánicos de 石台 Shítái atrajo a los turistas interesados en estos productos y lo que comenzó como una visita para participar en la Fiesta de la cosecha se transformó en un gran emprendimiento turístico por los hermosos paisajes de la zona, que se acompañan con deliciosos platos de frutas y verduras orgánicas.
Puede encontrar el documental completo más abajo.
Aguas cristalinas y montañas verdes
El segundo episodio se centra en otro aspecto importante del desarrollo moderno: conseguir el desarrollo de las áreas rurales a la vez que se protege el medio ambiente, dos ideas que parecen contradictorias, pero que en realidad pueden ir de la mano. El distrito de 融安 Róng ān, en la provincia de 广西 Guǎngxī ha sido históricamente famoso por la madera de abeto chino o abeto aromático, llamado así porque tiene una resina que le confiere un característico aroma. Desde finales de la dinastía 清 Qīng (1636-1912 e.c.) los lugareños se especializaron en la tala y venta de esta maravillosa madera.
Tras décadas de tala indiscriminada, comenzó a ser claro que las áreas de bosque habían retrocedido e incluso, a largo plazo, el sustento de los campesinos leñadores podía estar en peligro. Un plan de protección estatal de bosques viejos prohibió a los leñadores talar abetos de más de 25 años, creando así áreas protegidas. No obstante, esto llevó a que no hubiera trabajo en el distrito de 融安 Róng ān y la mayoría de los jóvenes se dirigieron a las ciudades para trabajar.
En 2009, una interesante legislación sorprendió a los vecinos de 融安 Róng ān. El gobierno permitiría la tala de los árboles de más de 25 años en zonas controladas, bajo la condición de que primero plantaran abetos jóvenes en una superficie mayor a la que se talaría. De esta forma, siempre que planten nuevos árboles, los leñadores pueden continuar con su trabajo de tala y procesamiento de la madera para la venta. Por primera vez se había encontrado un método que permitía a los lugareños ganar una buena cantidad de dinero con la venta de esta costosa madera a la vez que expandir las áreas forestales.
Un centro de investigación de la región creó semillas modificadas para los campesinos, que en lugar de tardar 25 años en crecer, toman solo 8 años. Esto permite que los plantines plantados con tanto esmero por los leñadores puedan ser talados en un menor tiempo, asegurando así que nunca se terminen los árboles adultos disponibles para su tala.
La reactivación de la tala de abetos llevó a que se reactivara la industria asociada al tratamiento de la madera, lo que proporcionó muchas fuentes de trabajo bien pagas a muchos campesinos. Un equipo de supervisión se encarga de controlar que los plantines hayan sido cuidados y se encuentren creciendo fuertes. Si es así, se les otorga a los leñadores un área de árboles maduros para talar proporcional a la plantación.
Desde la Federación de industria y comercio ofrecen los plantines mejorados a las familias más pobres así también como el asesoramiento de expertos en forestación para que puedan participar del proyecto y así mejorar sus ingresos a la vez que reforestan su provincia. De esta forma la gente puede salir de la pobreza plantando árboles.
Puede encontrar el documental completo más abajo.
Cambio de era
El tercer capítulo explora un cambio de mentalidad en la producción agraria. Mientras que en el pasado se buscaba aumentar la producción agraria sobreexplotando el suelo con los cultivos más rentables, en la actualidad este modelo no puede continuarse, porque lleva al agotamiento de los suelos y por tanto a la imposibilidad de continuar plantando. No todos los agricultores pueden permitirse nutrir a la tierra cada temporada con costosos fertilizantes, por lo que fue necesario buscar nuevas fórmulas de producción que aumentaran los rendimientos, redujeran los costes, incrementaran los ingresos y no destruyeran el suelo.
En el año 2009, 17 ganaderos de la provincia de 山西 Shānxī fundaron una cooperativa de vacas lecheras. Para unirse a la cooperativa no era necesario aportar dinero, sino aportar vacas lecheras. Gracias a la cooperativa, los ganaderos construyeron una granja comunitaria que ninguno podía permitirse por cuenta propia, con todo lo necesario para el cuidado de las vacas y lo último en tecnología para ordeñarlas. Mecanizaron el proceso de producción e implementaron controles de calidad en la leche.
Estudiaron la composición del forraje y crearon una fórmula unificada muy nutritiva para las vacas. Para determinar la mejor alimentación y mantener la salud del ganado consultan y se mantienen actualizados con las últimas publicaciones científicas relevantes. Así consiguieron no solo duplicar la producción de leche, sino también lograron garantizar la higiene de los productos lácteos.
Para complementar la industria lechera, crearon un sistema de rotación de pastos para crear un sistema de producción ecológica que aumenta el valor de los cultivos, recicla parte de los desechos y permite reducir los costes en fertilizantes. Por temporadas, las vacas pastan libremente en algunos campos, luego, se aplica un fertilizante ecológico preparado a partir de la fermentación del estiércol de vaca. En la producción del fertilizante, se produce biogás, que se utiliza en lugar del gas natural. Por último, los campos fertilizados pueden ser utilizados para el cultivo. De esta forma las vacas, los pastos y los cultivos van rotando para asegurar que el suelo no se agote con la producción intensiva.
Puede encontrar el documental completo más abajo.
Adaptarse a la naturaleza
El último capítulo de esta serie documental aborda otro interesante concepto: adaptar las técnicas de agricultura al entorno natural, no solo para proteger el medio ambiente y desarrollar prácticas sostenibles, sino también para aumentar la producción y por ende los ingresos en zonas desfavorecidas.
En la aldea de la provincia de 湖南 Húnán donde las tierras cultivables per cápita son muy pocas, hace 30 años los campesinos buscaban una forma de aumentar sus escasos ingresos. El comité de la aldea propuso crear una cooperativa por 20 años para cultivar de manera conjunta todas las tierras. Debido a la experiencia en otras provincias, se seleccionó la uva como el nuevo cultivo a desarrollar, ya que tenía un valor de mercado muy superior a otros cultivos tradicionales de la región.
Como la mayoría de los lugareños no tenía experiencia en el cultivo de uvas, los rendimientos fueron muy pobres y no superaron los ingresos que otros cultivos tradicionales tenían. Cuando estaban por darse por vencidos, las autoridades agrícolas locales detectaron que el suelo era muy rico en selenio, un oligoelemento esencial para el cuerpo humano. La Organización Mundial de la Salud reconoce al selenio como un elemento indispensable en la dieta.
Aunque hay un gran mercado para productos ricos en selenio, no es fácil trasladar el selenio del suelo a las uvas. Los campesinos se pusieron manos a la obra en la búsqueda y prueba de diferentes técnicas agrícolas para conseguir uvas ricas en selenio. Además, necesitaron de apoyo técnico para la implementación de las técnicas y el control del producto final. Algunos campesinos viajaron a otras regiones para aprender nuevas técnicas de cultivo que probar en su aldea natal. Durante 10 años, los campesinos trabajaron la tierra hasta crear una nueva variedad de uvas ricas en selenio.
El cultivo de uvas ricas en selenio se transformó en el pilar económico de esta aldea y pronto muchos turistas comenzaron a interesarse por la región, lo que abrió paso a un turismo ecológico que consiste en ir a recoger uvas de las plantas, disfrutar de la paz en un hostal rural, recorrer los hermosos paisajes de la zona y presenciar espectáculos culturales únicos de esta región.
Puede encontrar el documental completo más abajo.
Un documental para los hispanoparlantes
La CGTN en Español, la versión para hispanoparlantes de la Televisión Central de China, ha crecido mucho en los últimos años, en gran parte gracias al interés del público de nuestra lengua por los documentales, películas, series y noticieros chinos. En los últimos años, ha dado un paso adelante, teniendo producciones documentales originales enfocadas al público hispanoparlante fuera del país del Río Amarillo. A diferencia de otros documentales, el narrador es un hablante nativo del español, lo que ayuda a la comprensión y difusión de la serie documental. Con muy buen criterio, se ha optado por subtitular a los entrevistados chinos, para evitar que puedan ocurrir problemas de interpretación de sus frases. Cualquiera que tenga dudas sobre lo que los campesinos y científicos de este documental narran pueden escuchar detenidamente sus voces originales en chino.
Además de producir estos documentales para el público hablante del español, la CGTN los ofrece de forma completamente gratuita en su canal oficial de YouTube. A continuación, les compartimos la lista de reproducción con los cuatro capítulos completos; lo único que les pedimos es que, si miran la serie y la encuentran interesante, les dejen un “me gusta” y un comentario en español o chino para que continúen compartiendo estas magníficas obras con el público hispanoparlante.
¿Qué podemos aprender?
Por si sola, esta serie documental es sumamente interesante, ya que nos transporta a zonas rurales de China poco conocidas para el público internacional. No obstante, el valor de este documental trasciende el mero disfrute audiovisual o satisfacción de la curiosidad, es un documental que nos abre las puertas a nuevas ideas de desarrollo que en zonas rurales de Latinoamérica podrían marcar la diferencia entre la indigencia y el desarrollo. Cada historia es un conjunto de enseñanzas sobre diferentes principios que pueden guiar el desarrollo de las zonas rurales. Aunque normalmente se piensa en la creación de grandes latifundios que aplican gran cantidad de productos industriales para aumentar la producción y se valen de gigantescas máquinas para cultivar la tierra, estos costosos emprendimientos no siempre son posibles en algunas zonas rurales.
Ya sea para consumo de una clase media o alta que demanda productos orgánicos o naturales, o para exportar a países donde hay población dispuesta a pagar un sobreprecio para obtener frutas y verduras con este valor agregado, este tipo de producción agraria se presenta como una interesante salida para muchos campesinos. Como muestra el documental, la producción orgánica no necesariamente va de la mano de menores rendimientos, como normalmente ocurre. Si bien es verdad que tal vez obtendrían mayores rendimientos con las técnicas mecanizadas modernas, en todos los casos se trata de regiones donde los campesinos no cuentan con el capital para invertir o que las condiciones geográficas impiden este tipo de desarrollos. De hecho, como puede verse en muchos casos, la producción orgánica reporta grandes ingresos a los campesinos, lo que los lleva a poder invertir en maquinaria que antes no podían permitirse e incluso desarrollan sus propias metodologías de trabajo más eficientes y adaptadas a su producto y región geográfica.
En la serie puede verse que hay campesinos, de regiones extremadamente pobres, que pudieron leer publicaciones científicas especializadas que les permitieron mejorar la producción. Esto podría sorprender, pero se debe a que a todos se les ha proporcionado un buen sistema educativo, no solamente un sistema básico gratuito que les concede un título, sino una buena formación base que les abrió las puertas a un mundo que sus padres y abuelos nunca habían podido acceder.
Una forma de intentar desarrollar las áreas rurales podría ser conceder subsidios a las familias más pobres. No obstante, como puede verse en esta serie documental, aunque los subsidios y las becas de estudios de formación profesional pueden ser una ayuda, no son la clave para el desarrollo. Una inversión estatal, o incluso privada, mucho más rentable es la de enviar científicos y especialistas en agronomía a estar regiones para trabajar hombro con hombro con los campesinos. En varias de las historias, los especialistas descubrieron particularidades del suelo que enriquecen el producto final, o son capaces de recomendar uno u otro cultivo. De esta forma, con una inversión no muy grande se puede generar un lento pero continuo desarrollo de las aldeas.
Un documental para aprender
En China se realizan pruebas y experiencias constantemente en diferentes regiones. Estos experimentos suponen un gran riesgo, porque pueden fracasar, y a veces ocurre. Empero, también son la base de programas de gran éxito que han impulsado al país hacia el desarrollo. La experiencia de un campesino plantando uvas de forma exitosa en una región, puede ser la base para que otros aprendan de su experiencia y creen métodos aptos para sus aldeas natales. Los productos no se seleccionan únicamente por ser los más comunes o los que mejor rendimiento tienen en la región, sino que se tiene en cuenta su valor de mercado, buscando que por hectárea de tierra cultivada, el campesino pueda obtener el máximo beneficio posible. Si esto se consigue, la aldea se desarrolla y puede optar por preservar sus costumbres y desarrollar su cultura de cara al turismo. Nuevas formas de expresión artísticas y la conservación de antiguas artes culinarias, teatrales o producción artesanal llevan a que los jóvenes vuelvan a los pueblos para compartir con el turismo.
En una cueva donde se rodó una parte de la serie de 西游记 Xī yóu jì, Viaje al Oeste un grupo de actores locales representa una divertida escena en vivo. |
Es muy probable que la mayoría de los hispanoparlantes que vean este documental sean urbanitas, personas de ciudad con poca relación con áreas rurales pobres. No obstante, esta producción de la CGTN es una de las más interesantes para el público latinoamericano. Combinando entretenimiento con educación, este documental podría sentar las bases para que los hablantes del español encuentren nuevas ideas para desarrollar el campo. Esperamos que algún campesino o algún especialista vea esta serie y pueda tomar ideas para desarrollar alguna región pobre que esconde el secreto de la riqueza y el desarrollo en sus tierras.
中国梦 Zhōngguó mèng El sueño chino |
(1) CGTN en Español, Recorriendo el campo chino.
南