El Karst de China meridional. Un mar tropical en la montaña

La geología de China es tan interesante como compleja. Hoy en día, su extenso territorio posee una gran variedad de paisajes muy disímiles. Viajando por el país del Río Amarillo se pueden atravesar grandes desiertos, elevadas mesetas, largos ríos meandriformes, gigantescas mesetas de loess y extensas montañas de karst. Este último paisaje es, junto con el loess, uno de los más característicos y reconocibles del país. Grandes pintores chinos de la antigüedad han representado innumerables veces estas montañas kársticas, películas estadounidenses se han inspirado en sus puntiagudos picos e incluso toda una pujante industria turística se desarrolla en la región. 

Karst en la provincia de 云南 Yúnnán.

El desarrollo de estos paisajes kársticos es complejo desde el punto de vista geológico, en tanto ha atravesado muchas fases que están estrechamente relacionadas con la historia geológica de China. Con este artículo queremos ofrecer un acercamiento a su proceso de formación y desarrollo hasta llegar a los paisajes actuales. Para los lectores interesados en los detalles de la dinámica, ofreceremos algunas lecturas especializadas en la sección de notas.

¿Qué es esa cosa llamada karst?

Hay paisajes que rápidamente nos evocan imágenes, como un desierto de arena con sus dunas migrando al ritmo de los vientos o las cadenas montañosas con su lucha por alzarse a los cielos mientras son erosionadas por el agua y el viento, pero el karst es menos conocido. Una formación kárstica es un conjunto de rocas calizas, es decir, conformadas principalmente por carbonato de calcio, que han sufrido un intenso proceso de disolución que permite la formación de paisajes únicos. 

Vista panorámica de la ciudad de 桂林 Guìlín en un día de bruma, un paisaje kárstico único.

La formación del karst

Para que se desarrollen estas formaciones de karst, primero es necesario contar con una gran acumulación de carbonato de calcio. A diferencia de la arena de los desiertos o el polvo del loess, los carbonatos no provienen de la erosión de las montañas. Si bien en formaciones montañosas hay algo de carbonato de calcio, la erosión de una montaña produce una gran diversidad de sedimentos de composiciones muy variadas. Para que se acumule tanto carbonato son necesarias algunas condiciones especiales.

Los carbonatos se acumulan principalmente en aguas cálidas de tipo tropical. Si bien existe una reacción que ocurre cuando las aguas tienen mucho dióxido de carbono que da por resultado la formación de carbonatos, acumulaciones tan grandes como las presentes en China son el resultado de la actividad de organismos. En las zonas tropicales, el agua cálida permite el desarrollo de una rica diversidad de organismos. Muchos grupos de organismos secretan estructuras de carbonato de calcio para construir sus cuerpos. Los ejemplos más evidentes pueden ser los gastrópodos y bivalvos, que construyen sus conchas con este mineral. Cuando las condiciones ambientales son buenas, estos organismos son capaces de construir verdaderas montañas de conchilla bajo el mar. Otro organismo tropical que construye grandes estructuras de carbonato son los corales, unos animales del grupo de los cnidarios que pueden desarrollar peligrosas barreras para los barcos. 

Fotografía de un fondo marítimo tropical actual dominado por corales.

Unos organismos muy particulares

Si bien gastrópodos, bivalvos y corales pueden construir grandes acumulaciones de carbonatos, difícilmente podrían construir acumulaciones de carbonatos tan extensas como las que forman los karst de China meridional. Las formaciones de karst abarcan las provincias de 贵州 Guìzhōu, 广西 Guǎngxī, 云南 Yúnnán y 重庆 Chóngqìng, cubriendo un total de 176.228 hectáreas con grandes montañas y colinas de karst. Tan solo un grupo de organismos muy especiales pueden formar estas grandes acumulaciones.

Además de los gastrópodos, bivalvos, corales y otros organismos macroscópicos, diferentes grupos de organismos microscópicos son en realidad, los principales constructores de estas estructuras de carbonato de calcio. Entre estos últimos, algunos son algas microscópicas, como el nanoplancton calcáreo, que viven en la columna de agua realizando fotosíntesis, y otros son foraminíferos, un grupo de protistas ameboides que viven en la columna de agua atrapando pequeñas partículas. Las algas construyen estructuras de carbonato como parte de su ciclo metabólico. El volumen de producción y el área sobre la que pueden habitar puede ser gigantesca. A lo largo de millones de años, si las condiciones ambientales lo permiten, la acumulación de estas estructuras microscópicas puede formar gigantescos bancos kilométricos. 

Nanoplancton calcáreo.

En tierra firme

La acumulación de estos carbonatos biogénicos no es suficiente para que se forme el karst. Si tan solo se acumulan carbonatos en el fondo de un mar, obtendremos rocas de caliza al cabo de algunos millones de años. Los karst de China meridional son un buen ejemplo que pueden ayudarnos a comprender la formación del karst.

Hace alrededor de 550 millones de años, hacia el final del Paleozoico, las actuales provincias de 贵州 Guìzhōu, 广西 Guǎngxī, 云南 Yúnnán y 重庆 Chóngqìng formaban parte del fondo de uno de los mayores mares de la Tierra: el mar de Tetis. Se trataba de un gigantesco mar de aguas poco profundas ubicado sobre el ecuador. Sus aguas eran cálidas y se desarrollaba una gran diversidad de organismos. Durante el Paleozoico (hace entre 2.500 y 541 millones de años) el clima global permaneció relativamente frío debido a una serie de glaciaciones, pero hacia el final de la era, un cambio climático produjo un aumento de la temperatura. Este aumento de la temperatura contribuyó a que más organismos se desarrollaran en las costas marítimas y extendió las zonas de aguas cálidas hacia los polos. Además, muchos glaciares se fundieron y aumentó el nivel de los mares. Este aumento del nivel del mar llevó a que muchas zonas bajas fueran inundadas por los mares, aumentando así las regiones donde los organismos marinos se podían desarrollar. 

Reconstrucción de los paleocontinentes durante el período Triásico (hace 200 millones de años).

En la era de los dinosaurios

Durante la era Mesozoica (hace 241 a 66 millones de años atrás), mientras los dinosaurios aprovechaban el cambio climático para colonizar todos los continentes, el mar de Tetis sufrió muchos cambios geológicos, pero continuaba cercano al ecuador y con una gran diversidad de organismos que secretaban estructuras de carbonato. Esto formó los grandes depósitos de rocas calizas que permitieron el desarrollo del karst.

Hace 71 millones de años, mientras dinosaurios como Confuciusornis perfeccionaban el vuelo, la placa de India comenzó a migrar en dirección norte, convergiendo con la placa Euroasiática. Esto provocó el ascenso de grandes cadenas montañosas y mesetas en el actual territorio chino. Lo que antes era un mar, comenzó a ascender, presionado por la placa de India. Así, mientras en el actual Tíbet se formaron los Himalayas, en el sur de China las rocas calizas fueron expuestas al aire. 

Fósil marino de un Amonite de hace alrededor de 500 millones de años descubierto en los Himalayas. Fotografía de Eccentric Travels.

La formación de un paisaje único

El agua dulce junto con ácidos orgánicos que recorre las rocas calizas, producto de las lluvias los ríos, provoca un proceso de disolución de las rocas calizas. Esta disolución de carbonatos se conoce como karstificación y da como resultado la formación de una nueva roca, menos porosa que la caliza.

A lo largo de millones de años, la roca caliza del mar de Tetis se karstificó dando lugar a los exóticos paisajes de ciudades como 桂林 Guìlín. La karstificación se produce a la vez que las rocas calcáreas son erosionadas, por eso los paisajes kársticos poseen montañas en forma de espada, columna, cono y domo tan particulares. La karstificación de una parte de la caliza transforma las propiedades de la roca, volviéndola muy resistente por su baja porosidad y permeabilidad. Esta roca kárstica resistente conforma la cumbre de una montaña o colina de karst. La caliza alrededor de esta primera karstificación es erosionada y transportada por el agua y los vientos. Es por esta razón que, en los casos más curiosos, se pueden formar verdaderos bosques de columnas kársticas, ya que todas las rocas calizas inferiores son protegidas por el primer karst. Con el paso del tiempo, las partes bajas de estas montañas en forma de columna también se karstifican.

Inspiración de los artistas

El karst es uno de los paisajes más asociados con China, a pesar de que muchos no conocen su nombre ni su proceso de formación. Grandes pintores, calígrafos y poetas se han inspirado en estos particulares paisajes de belleza única. Junto al 黄河 Huánghé, Río Amarillo, el 长江 Chángjiāng (Yangtzé) y la meseta de Loess, el karst ha formado parte de la identidad de China. Existen formaciones kársticas en otras regiones del planeta, pero ninguna tiene el particular encanto y la extensión que tiene el karst de China meridional. 

Antigua pintura 唐 Táng (618-906 e.c.) de autor desconocido titulada: 明皇幸蜀 Míng Huáng xìng Shǔ, "El emperador Míng Huáng viajando a Shǔ". Las extrañas montañas solo pueden ser montañas kársticas.

(1) Para quienes deseen profundizar más en el karst de China recomendamos la siguiente bibliografía:

- Waltham, Tony, 2009, Classic localities explained 3, The karst lands of southern China. Geology Today, Vol 25, No. 6.

- Zhang, Zhigan, 1980, Karst Types in China. GeoJournal 4.6.

- Sweeting, Marjorie M., 1995. Karst in China, Its Geomorphology and Environment. Ed. Springer.

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